Videoclips inolvidables, auténticas rarezas para ser descubiertas y conciertos míticos forman parte del legado de la banda de Oxford disponible en su biblioteca ‘online’ 

A estas alturas del siglo XXI, no parece necesario presentar todas las virtudes de una banda como Radiohead. Que si revolucionaron la industria musical cuando publicaron ‘In rainbows’ en formato digital pidiendo a sus seguidores que pagaran lo que quisieran para poder descargárselo. Que si pusieron los cimientos de muchos otros grupos que triunfaron posteriormente gracias a una obra maestra como ‘OK Computer’, uno de esos discos que se escuchan de principio a fin. Que si supieron dar un giro radical a su música, sin morir en el intento, y dejaron de ser una banda de rock al uso con ‘Kid A’ y ‘Amnesiac’. Que si ‘Creep’ es… Etcétera. Su último golpe de efecto ha sido poner a disposición del público todo su material (discos, EP, ‘demos’, ‘merchandising’, videoclips, conciertos, caras B, fotografías, ‘artwork’…), ordenado cronológicamente, a través de una biblioteca ‘online’ en su web, que incluye muchas rarezas hasta ahora inéditas en las plataformas de ‘streaming’, como su EP de debut, ‘Drill’, o la canción ‘I want none of this’, publicada en el álbum recopilatorio para fines benéficos ‘Help: A Day in the Life’, en 2005, además de numerosos remixes e incluso versiones extendidas (‘Treefingers’). A continuación, repasamos los contenidos que todo fan de la banda, y de la música, debería ver y escuchar, sin ningún orden concreto. Última llamada para subirse al tren de Radiohead. 

1. Descubrir su cara B

La biblioteca de Radiohead, a través de las diferentes plataformas de ‘streaming’, permite escuchar algunas de esas gemas de su catálogo menos conocidas. Especialmente destacan canciones en las que el piano es el protagonista principal,  como ‘Spectre’ –finalmente descartada como tema principal de la película de 007 del mismo nombre, ¡vaya error!–, ‘The Daily Mail’ –que de haberse grabado unos meses antes, hubiera elevado enormemente el nivel del álbum ‘The King of Limbs’, como sucede con ‘Supercollider’ y ‘Staircase’–, ‘I want none of this’, ‘Fog (again)’, ‘Down is the new up’ y ‘Cuttooth’, y las cuerdas, como la emotiva ‘Harry Patch (In Memory of)’, en la que se homenajea al último soldado británico superviviente de la I Guerra Mundial, quien falleció en 2009 con 111 años. «Soy el único que se salvó / los otros murieron allá donde cayeron...», comienza la letra de la canción, haciendo referencia a las palabras del propio Harry Patch en las que describía su desgarradora experiencia en el campo de batalla en una entrevista que concedió a la BBC. Cualquiera de estas canciones no hubieran desentonado en los discos, al igual que ‘Maquiladora’, ‘Killer cars’, ‘The Amazing Sounds of Orgy’, ‘Trans-Atlantic Drawl’, ‘Polyethilene Parts 1 & 2’, ‘Talk Show Host’, ‘Bangers & Mash’, ‘Man of War’, 'I promise’, ‘True Love Waits’ (versión acústica)…

2. Rememorar sus videoclips

Radiohead siempre ha sido una banda que ha cuidado mucho sus videoclips. Desde el más moderno ‘Daydreaming’, pasando por los bailes de Thom Yorke en ‘Lotus Flower’, las imágenes 3D de ‘House of cards’, la preciosa animación de ‘Pyramid song’, las delicias visuales de ‘Burn the witch’, ‘Knives out’ y ‘There there’ y clásicos presentes en el imaginario colectivo de los 90 como ‘Just’, ‘Street Spirit’, ‘No Surprises’, ‘Paranoid Android’ y ‘Karma Police’, además de la mítica ‘Creep’. No en vano, ha contado con varios de los mejores cineastas del panorama actual, como Paul Thomas Anderson (‘There will be blood’, ‘Magnolia’, ‘Boogie nights’…), Michel Gondry (‘Olvídate de mí’) y Jonathan Glazer (‘Sexy beast’, ‘Under the skin’…) detrás de las cámaras.

3. Conciertos históricos y apariciones televisivas

Si por algo destaca la biblioteca ‘online’ de Radiohead es por el amplio catálogo de conciertos y apariciones televisivas (MTV, ‘Top of the Pops’, ‘Later... with Jools Holland’, ‘The Jonathan Ross Show’, ‘The Colbert Report’ y, especialmente, los dos programas ‘From the basement’) con los que cuenta, de todas las épocas y en diferentes calidades (la mayoría directamente de los canales de TV que los emitieron en su momento y de YouTube, aunque algunos también proporcionados por fans). La lista de las actuaciones para ver es muy amplia, desde las actuaciones en los festivales Pinkpop (1996 y 2001), Glastonbury (1997 y 2003), Eurockenees (1997 y 2003), Rock am Ring (1994 y 2001), Bonnaroo (2006 y 2012), Reading (1994 y 2009), Outside Lands (2008), Austin City Limits (2012) y Coachella (2012), hasta el concierto para la liberación del Tíbet (1998) y en ciudades como Saitama (2008), Praga (2009), Buenos Aires (2009) y Dublín (2000).

4. Sorprenderse con las canciones de ‘Kid A’ en directo

Aunque la calidad no es la mejor (se nota mucho el paso del tiempo), el concierto transmitido por Canal+ en abril de 2001 simultáneamente en varios países de Europa para la presentación de ‘Amnesiac’ muestra la nueva vida y la fuerza que cobran en directo los temas de ese disco y de su gemelo ‘Kid A’, especialmente ‘National anthem’, ‘Morning bell’, ‘You and whose army’ y ‘Everything in its right place’, además de la interesante reconstrucción de ‘Packt like sardines in a crushed tin box’ y una gran interpretación acústica de ‘How to disappear completely’ con extra de ondas martenot, que también brillan en ‘Pyramid song’. Y para acabar, una versión rockera, ‘Cinnamon Girl’ de Neil Young, que en la retransmisión original en España no fue incluida. La conclusión es que hay mucha más humanidad, y guitarras, en esas canciones de lo que parece en los discos.

5. Maravillarse con el ‘OK Computer’ entero (y también ‘In rainbows’)

El Live at the 10 Spot, en Nueva York, es uno de los pocos conciertos en los que la banda tocó íntegramente su mejor álbum hasta la fecha, ‘OK Computer’, allá por el año 1997. Incluye grandes versiones de ‘Paranoid android’, ‘Exit music’ y ‘Subterranean homesick alien’, y unas muy furiosas ‘My iron lung’, ‘The bends’ y ‘Planet telex’, de cuando el guitarrista Jonny Greenwood llevaba su muñequera especial. En el vídeo se demuestra por qué la necesitaba tanto en aquella época. El concierto también será recordado por la fan gritona del público, especialmente durante ‘No surprises’, justo cuando Thom canta eso de «silent», y en muchos otros momentos. Hasta le tuvo que dedicar una canción en los bises por sus chillidos. Otro concierto recomendable es el de 2008 en el Santa Barbara Bowl, donde la banda toca todas las canciones de ‘In rainbows’, además de ‘Go slowly’, incluida en el segundo disco de la edición limitada. O directamente se pueden escuchar los dos discos, pero eso sí, de principio a fin. 

6. Explorar la última gira

La banda británica ofreció hace algún tiempo varios de los conciertos de la gira de festivales de ‘A Moon Shaped Pool’, tanto de 2016 como de 2017, en lugares icónicos como Rock Werchter, Glastonbury (el único que no está completo), Summer Sonic, Lollapalooza y Coachella. La web de la banda los recopila todos, para disfrutar de los variados repertorios que siempre caracterizan los ‘shows’ de Radiohead, con canciones como ‘Airbag’, ‘Let down’, ‘Myxomatosis’, ‘Reckoner’, ‘Bodysnatchers’, ‘Like spinning plates’ e incluso ‘Creep’ (Tel Aviv), y otras más habituales de sus ‘setlists’.  

7. Gozar con ese ‘solo’ de ‘Go to sleep’

Si hay un tema que brillaba en directo de la etapa de ‘Hail to the thief’, ese es ‘Go to sleep’, que apenas se tocó dos veces más en 2012 fuera de la gira de aquel disco. Y el motivo es el impresionante solo de guitarra, por llamarlo de alguna forma, del final de la canción de Jonny Greenwood (por ejemplo en el concierto de ‘Later... with Jools Holland’ o en el Beacon Theatre de Nueva York), con una interminable sucesión de efectos que suenan como un módem o a una máquina estropeada. Puede que no sea su solo más virtuoso, pero el resultado es simplemente espectacular –no era nada raro en aquella época que el público vitoreara su nombre al final de la canción, tal y como sucedió en la Plaza de Toros de Las Ventas en su última visita a la capital–.

8. Evocar a los Radiohead más cañeros

El directo en el Astoria de Londres de 1994 fue publicado originalmente como VHS, en 1995, y después remasterizado y lanzado en DVD una década después. En él se comienza a vislumbrar la evolución de la banda del flojo ‘Pablo honey’ a su primer disco de 10, ‘The bends’, con canciones como ‘Bones’, ‘My iron lung’, ‘Street spirit’ y ‘Just’, y versiones primerizas de ‘Black star’ y ‘Fake plastic trees’. Recomendado para los amantes de los temas más guitarreros de los de Oxford. El concierto apenas da momentos de tregua. «Puedo ver que os estáis quedando durmiendo, así que…», dice Thom Yorke justo antes de atacar ‘Just’ y subir de nuevo las revoluciones.

9. Admirar el arte de Stanley Donwood

Si se habla del productor Nigel Godrich como el sexto componente de Radiohead, del equipo titular también formaría parte Stanley Donwood y sus creaciones para el ‘artwork’ y las portadas de los discos de la banda, entre las que destacan los paisajes postapocalípticos y los osos mutantes de ‘Kid A’, o esa especie de minotauro llorando de ‘Amnesiac’. La web también permite volver a ver todos esos vídeos de apenas unos segundos (Blips) con las imágenes creadas por Donwood que la banda utilizó como única promoción de su cuarto disco en el año 2000, además de las portadas de los álbumes y los EP y otras imágenes promocionales.

10. ‘Anyone can play guitar’ y lanzar la guitarra al aire

Uno de esos instantes míticos recogidos de Radiohead es el concierto en el festival de Reading de 1994, con Thom Yorke lanzando al suelo su guitarra al final de ‘Anyone can play guitar’ y Jonny Greenwood haciendo malabarismos con la suya y girándola 360 grados en el aire en su ‘solo’ más extraño (que repetía habitualmente, como en Glastonbury, donde hay hasta patadas a la guitarra). Digno de ver, y más con la perspectiva del tiempo. Otro concierto cañero, con el público sin parar de saltar durante los poco más de 40 minutos de ‘show’ y pinceladas del disco ‘The bends’ más una rompedora ‘Maquiladora’.

11. Contemplar su alergia al estrellato

Ya recomendamos el documental ‘Meeting people is easy’ entre las películas con temática musical para los aburridos días de cuarentena. Se trata de un crudo relato de la promoción y gira de ‘OK Computer’ que se centra en el agotamiento total de la banda y, especialmente de Thom Yorke, al que se muestra sobre el escenario cantando ya con hastío ‘Creep’ –en esa gira desapareció del mapa de sus ‘setlists’–, sus problemas para realizar el agradecimiento de un premio desde Japón o para grabar un nuevo tema. Además, se puede descubrir cómo nacen canciones como ‘I will’, ‘Follow me around’, ‘How to disappear completely’, ‘Nude’ y ‘Life in a glasshouse’.

12. Disfrutar de las versiones acústicas

Durante la promoción de ‘Hail to the thief’, en 2003, Thom Yorke y Jonny Greenwood hicieron varios conciertos acústicos grabados para televisión y radio. Dos de ellos son en Montreal (Musique Plus) y París (Le Reservoir), y se puede ver su interpretación más básica de varias de las canciones del disco que presentaban (‘There there’, ‘Go to sleep’, ‘Sail to the moon’, ‘I will’ y ‘A Punchup at a Wedding’), además de clásicos (‘No surprises’, ‘Karma police’, ‘Street spirit’, ‘I might be wrong’, ‘Knives out’ y ‘Everything in its right place’). El dúo también actúa en el programa ‘MTV’s Most Wanted’, en 1994, tocando dos de las primeras canciones de la banda, ‘You’ y ‘My iron lung’, y en Japón, en 1995, donde destaca ‘Bullet proof ... I wish I was’. Y los vídeos de ‘The numbers’ y ‘Present Tense’.